La calle Abadía Santa Ana es un callejón sin salida en cuyo extremo se encuentra precisamente el edificio que albergó la orden del Císter durante 400 años. En el año 2009, debido a las escasas nuevas vocaciones, las religiosas fueron trasladadas y las instalaciones clausuradas, lo que ha conllevado el cierre del 'Museo de Arte Sacro' que se custodiaba en su interior. En enero de 2014 se recuperó la capilla para sede canónica de la cofradía del Santo Sepulcro de la capital.

Para esta comparativa disponemos de tres imágenes, la primera es de los años 40 del siglo XX, la segunda de los años 70 del mismo siglo, y la última es de 2012. La calle no ha sufrido cambios importantes. Si prestamos atención solamente a la primera y a la tercera imagen parece que no haya pasado el tiempo. Se ve sin embargo que existían unos faroles que colgaban de la facahda que años más tarde pasan a ser faroles de pié. En esta época estaba permitido aparcar en esta vía, hoy totalmente peatonal. También parece que se eliminó el inapropiado tejadillo que se ve en la foto central a la derecha, puesto que no existe hoy día, y se ha cercado la entrada al monumento con una verja de hierro.

Lo que se echa en falta en la última imagen es algo de vegetación en comparación con la primera. En ésta se ven los balcones y rejas llenos de macetas y plantas. Además, no lo he podido confirmar, pero seguramente en la segunda imagen el color de la Abadía de Santa Ana no era del tono rosado que presenta en la actualidad. Existen imágenes del edificio pintado en un color albero de tonos claros.